Pauline

5 de octubre de 2024

#Asia #Indonesia #Bali

Cómo evitar el Bali Belly: consejos prácticos para viajar seguro

Bali es un paraíso… pero el Bali Belly es la pesadilla que todos queremos evitar. ¡No te preocupes! Con unos cuantos consejos, estarás en plena forma y listo para disfrutar al máximo de tu estancia.

¿Qué es el Bali Belly y cuáles son sus síntomas?

El Bali Belly no es más que una forma de diarrea del viajero o un trastorno digestivo temporal, que suele ser causado por el consumo de alimentos o agua contaminada. Los síntomas más comunes incluyen:

• Diarrea: Suele ser el primer signo de que algo no va bien.
• Calambres estomacales: Sensación de dolor y cólicos en el estómago.
• Vómitos: Pueden presentarse en casos de infecciones más graves.
• Fiebre leve: A veces, el cuerpo reacciona con un ligero aumento de temperatura.

¿De dónde proviene el Bali Belly?

Estas son las principales causas a tener en cuenta:

• El agua del grifo: No la tomes, ni siquiera para usos como lavar frutas o cepillarte los dientes. Puede contener bacterias como E. coli u otros patógenos capaces de alterar tu sistema digestivo.
• Higiene alimentaria: La cocción insuficiente de los alimentos, las condiciones de almacenamiento inadecuadas o la manipulación con manos sucias contribuyen a la aparición del Bali Belly. Los puestos callejeros son especialmente susceptibles, aunque algunos de ellos ofrezcan platos deliciosos.
• Bacterias locales: Los habitantes de Bali desarrollan una inmunidad natural a los microorganismos locales, pero tu estómago no está preparado. Incluso restaurantes de renombre pueden introducir inadvertidamente bacterias que te hagan enfermar.

Ten cuidado, ya que el Bali Belly puede ser causado por mucho más que el agua o los alimentos.

Consejos prácticos para evitar el Bali Belly

• Evita el agua del grifo: Bebe siempre agua embotellada, incluso para cepillarte los dientes.
• Mantente hidratado: Aunque bebas agua embotellada, hazlo en pequeñas cantidades a lo largo del día para evitar la deshidratación en caso de problemas digestivos.
• Evita el hielo: Rechaza añadirle hielo a las bebidas, a menos que estés seguro de que están hechos con agua embotellada.
• Cuidado con los zumos: Aunque están muy buenos, pueden prepararse con agua no embotellada o con hielo. Pregunta siempre cómo se han preparado antes de tomarlos.
• Lávate las manos con frecuencia: Antes de cada comida, especialmente después de tocar dinero o superficies públicas. Lleva contigo gel desinfectante por si no tienes acceso a agua y jabón.
• Lleva medicamentos básicos: No olvides llevar medicamentos para el malestar estomacal, carbón activado y electrolitos, por si acaso.
• Refuerza tu flora intestinal: Toma probióticos antes del viaje para ayudar a tu sistema digestivo a adaptarse a las nuevas bacterias.
• Verifica las opiniones de los restaurantes: Elige comer en los sitios con mejor valoración y evita los puestos callejeros dudosos.

¿Qué hacer si tienes Bali Belly?

• Hidrátate: Bebe pequeños sorbos de agua, sopas o alguna bebida que contenga electrolitos.
• Descansa: Dale tiempo a tu cuerpo para recuperarse.
• Evita productos lácteos, alcohol y cafeína: Estos elementos pueden agravar los síntomas.
• Consume alimentos ligeros: Arroz blanco, plátanos, compota de manzana… son alimentos suaves para tu estómago.
• Busca ayuda: Si los síntomas continúan y no ves que mejoras, ponte en contacto con tu seguro de salud o ve a un centro de salud. Ellos te darán medicina y la recuperación será mucho más rápida.

Con estos consejos, estarás listo para disfrutar de Bali sin preocuparte por el Bali Belly. ¡Y buenas noticias! Estamos preparando una guía completa sobre Bali para ayudarte a organizar el viaje de tus sueños. ¡Mantente atento!